Quise cambiar mi vida;
desee con fuerza que se borraran mis lágrimas;
que una sonrisa supliera cada astilla
que me clavaba.
Y logré olvidar lo que era un llanto,
ya no más que un recuerdo amargo.
Quise que alguien me demostrara
que yo puedo ser valorada.
Tengo fe
cuando pienso que puedo luchar
con mi propio pie.
Se la confusión al amar,
siendo sólo un reto... nada más allá...
Se lo que es morir por el dolor del alma;
que te tiemblen de deseo,
que te amen de verdad.
Querer sin correspondencia,
no corresponder cuando te quieren.
Sentirte solitaria,
sentir que todo temes.
Peor no es que no te entiendan,
si no darte cuenta
de que no hay nadie que lo haga.
Que no te den esperanza,
que te miren infravalorada.
La vida es un juego de aguante.
Pender de un hilo
y soportar la carga sobre ti mismo.
A veces puedes temblar,
puedes resbalarte...
pero jamás te venza el miedo.
La vida es una.
Como una copa que atraviesa tu pecho
con estrago.
Tómala con bravura.
Mira cada gesto,
cual no se valora.
Ama a quien se muere por ti.
Porque detrás de esta vida,
de lo que no has hecho,
y de lo que has hecho mal,
te podrás arrepentir...
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